Valeria Luiselli. La historia de mis dientes. México: Sexto Piso, 2013, 156 p.
La historia de mis dientes surgió cuando la Fundación Jumex, a través de los curadores Juan Gaitán y Magali Arriola, invitó a Valeria Luiselli a escribir un texto de ficción a partir de las piezas de la exposición “El cazador y la fábrica”1. La autora les propuso hacer un texto por entregas, a la manera decimonónica, para que los trabajadores de la fábrica de jugos lo leyeran y comentaran. Este proceso constituyó una experiencia de escritura muy distinta y alejada de la forma habitual en la que la autora trabaja, al respecto Luiselli comenta:
Escribir por entregas fue, supongo, la experiencia más entretenida y aterradora que he tenido. Tuve que salir por completo de mi zona de comodidad. Suelo trabajar obsesivamente cada texto, cada fragmento, cada línea que escribo. La escritura por entregas es una forma de dar la cara, y yo no suelo mostrar nada de lo que escribo hasta que no esté exhaustivamente trabajado –tal vez por eso mis libros sean tan cortos, mis incursiones en el periodismo tan esporádicas, y no haya tenido nunca un blog–. La dinámica de las entregas me obligó a abandonarme a un ritmo diferente y a despojarme de esa forma tan torcida de la vanidad que es el perfeccionismo.2
A lo largo de seis capítulos La historia de mis dientes narra la vida de un personaje poco común, Gustavo Sánchez Sánchez, alias Carretera. Un hombre que, aunque podría parecer desafortunado a los ojos del lector, está orgulloso de las que considera sus más grandes cualidades: “puedo imitar a Janis Joplin después de dos cubas. Sé interpretar galletas de la suerte. Puedo parar un huevo de gallina sobre una mesa, como hacía Cristóbal Colón. Sé contar hasta ocho en japonés: ichi, ni, san, shi, loko, sichi, hachi. Sé nadar de muertito”, (p. 19).
La vida del protagonista está llena de situaciones absurdas y de decisiones poco pensadas, lo que explica que muchas veces pierda el timón de su situación familiar y tenga una pésima relación con su único hijo, Ratzinger.